Tu compañero se fue inesperadamente, sin despedirse.
Por eso busqué durante varios años la forma de llegar a ti y
llevarte ese adiós que mi padre no pudo darte. Por fin pude atravesar
Europa y darte su abrazo de despedida. Todavía hoy me emociona
recordar aquel encuentro en tu casa de Moscú.
Clicad en el link: http://youtu.be/zPiAnpYkiQw
Que bonito, José, haber podido abrazar a un amigo tan querido por tu padre....desde donde esté, te agradecerá lo que hicistes en su nombre.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Leonor